lunes, 21 de mayo de 2012

María Rodés y Ramón Rodríguez en Conciertos Mínimos

 


... ¿Hola? ¿Es que nadie va a decir nada del suelo? Porque María y Ramón molaron pero el tema suelo de cristal transparente sobre gruta de diez metros de profundidad... mecagoenlaputa, no era apto para gente con vértigo como nosotras. Menos mal que el vinito y el buenorrismo inocentón de María Rodés nos hicieron olvidarnos pronto de mirar hacia abajo.

Pero empezando por donde empiezan las cosas, primero hay que hablar de unas señoritas, a cada cual más fornicable, a las que tenemos que agradecer el haber podido disfrutar del concierto de María Rodés y Ramón Rodríguez: las chicas de Almma. Si hubiéramos llevado bragas, hubiesen ido para ellas porque se lo montan hardcoretamente bien. Resulta que cada XXX tiempo organizan unos Conciertos Mínimos en The Wall Bar del Hotel Vincci Posada del Patio, cuya característica principal es el VINO GRATIS (con tu entrada) acompañado de EMBUTIDO GRATIS, CHAPITAS GRATIS y algún grupillo musical, creo. Y si una cosa se puede decir de los españoles es que lo gratis gusta más que a nosotras Javier Rivera (un besito cari).

Sobre María Rodés, para quien no la conozca: MAL MAL MAL. Aparte de estar de rechupete la muchacha canta como los ángeles mezclando guitarras con ruiditos y gestos de... Y Ramón Rodríguez, que venía acompañándola, pues como todos sabréis menos los que no lo sepáis, es el cantante de The New Raemon. Pero no se queda ahí la cosa, Ramón tiene tiempo y talento para muchas cosas más (alguno de los cuales nos gustaría descubrir más íntimamente) entre ellas, esto: Ausencias. Es curioso porque buscando información sobre Ramón en el Oh Todo Poderoso Google, el tercer resultado al buscar su nombre nos dice claramente que Ramón Rodríguez es gilipollas Y rebuscando más, vimos que también es conocido como Dramón Rodríguez, pero la verdad es que en el concierto se encargó de no dejar que ninguna canción nos enterneciera el corazón con sus bromas.

El escenario estaba decorado con lucecitas de navidad (¿Cómo pueden siempre quedar tan bien?) y los privilegiados estábamos sentados en sofás gracias a que gente mucho más lista que nosotros había llegado con tiempo para catar el vino y cogernos sitio. Empezaba el concierto así que cogimos dos copas de vino extra y nos sentamos. Y ahí empezó María a poner carusa al cantar lo que hay que oír (y ver, nena, y ver) y demás canciones de su repertorio con las que nos era difícil sacar la parte obscena. Escucharla en directo es diferente, se te quitan las ganas de jugar al cuarto oscuro con ella y lo que apetece es cerrar los ojitos y que te cante así al oído. Creó un ambiente tan especial que hasta el ver a un montón de gente guapa comiendo salchichón como si no hubiera un mañana, resultaba enternecedor. Pero vamos, que a nosotras la ternura nos duró lo que tardaron en decir que se iban a marcar un concierto teta a teta.

Cuando Ramón se incorporó a la actuación, escuchamos la voz tan reconocible de Madee y The New Raemon y algo en nuestro cuerpecito se nos hizo aguachirri. Al pobre se le olvidó la letra en mitad de una canción pero tenéis que perdonarle, nos tenía justo en frente y llevábamos transparencias. Es una reacción habitual. Inciso: Aparte de vertigosas, las bragas voladoras somos un poco miopes. Como era de esperar, nos olvidamos las gafas, por lo que no pudimos memorizar cada pelo de tu barba Ramón, pero sí que memorizamos tu voz y tenemos que decirte que por las noches te escuchamos susurrándonos cosas nada católicas antes de dormir... grrr... Fin del inciso.

Entonces volvió María y nos pidió una colaboración en la que teníamos que hacer ruidos de lluvia. Bien chicos, nosotras no sabemos lo que entendisteis pero el fft ffft ffft que hacíais con la saliva sonaba a otro tipo de lluvia. Nosotras hicimos lo de hacer sonar el borde de la copa, porque eso de tener una excusa para lamernos el dedo en público ya sabéis lo que nos gusta. Pero bueno, se ve que tampoco lo hicimos tan mal o al menos, no peor que los catalanes según nos dijo ella. Inciso: María, eso de usar el típico truco barato de la camiseta que se te va cayendo y enseñas el hombro... nos encanta. Y lo de abrir la boca mucho antes de empezar a cantar... ¿era una provocación? porque lo conseguiste y tenemos varias opciones con las que tapártela. Fin del inciso.

Y regresó Ramón con  una canción en la que nos pedía "silencio machotes, ya sé que hay vino y queso". Pues sí Ramón, como bien dijeron por ahí, con el vino, el concierto pasa a segundo plano. Los conciertos mínimos son peligrosos. Nos entraron ganas de citar a Ricardo Castella y plantear la opción de cerrar las puertas y montar una orgía. Pero fijáos lo que afectaba el vino que cuando Ramón presentó la canción de "te debo un baile" hubo un grupo demasiado grande de asistentes que entendimos claramente "te pido un baileys". Por favor deja un comentario si tu también escuchaste eso.

Y así fue siguiendo el concierto, entre bromejas de Ramón sobre el consumo de drogas de María y regresiones a la buena música de nuestra infancia. Disfrutamos de la metamorfosis de la voz de María de cuando habla a cuando canta, de los comentarios de Ramón a.k.a. papi chulo sobre su hija, y nos enteramos de que la Srita. Rodés está soltera desde hace un mes y repartiendo pornografía emocional para incitarnos. Y claro al final con la necesidad de saber si ha venido a Málaga por el pescaíto de los chiringuitos o el de las sábanas, acabamos intentando averiguar su orientación a partir de sus cejas. No sacamos nada en claro.
 Nuestra experta en cachibaches musicales destacó la maravillosa combinación entre la guitarra aguamarina de María y el pedal rosa Chiclet de Ramón. Un conjunto moníiiisimo.

En fin, la verdad es que las Bragas Voladoras lo pasamos genial. Llevábamos unas cuantas pegatinas que molaron tanto que una chica nos persiguió por la calle y nos hizo el baile del pollo con una pata a cambio de la última que nos quedaba, a nosotras no nos convenció mucho que nos bailasen canciones infantiles así que le pedimos que hiciera un paso de baile sexy y la muchacha no tuvo ningún problema. Pegatina para el equipo de las chicas.

Al finalizar el concierto tuvimos la oportunidad de darles un poco la tabarra con un par de preguntas bastante absurdas y obscenas que, la verdad chicos, no os currásteis mucho en contestar, pero bueno aquí las tenéis:

¿Quién te parece actualmente el/la más follable del panorama musical español actual?
Ramón: ¿Yo te digo a ti y tú a mi?
María: Vale
Bragas Voladoras: no me lo esperaba para nada (pensamiento interno irónico)

¿Qué canción de vuestro repertorio es la más propia para hacer guarrerías?
Ramón: Yo solo hago canciones de llorar.
María: Lies
Bragas Voladoras: Ramón, ¿Te enseñamos qué guarrerías inspiran tus canciones? (pensamiento interno hot)


Para terminar, el recuento de votos en el concurso del más follable tiene a María Rodés como ganadora indiscutible. Quién te pillara, buena moza. Intentaremos hacerte llegar tu premio a la más follable.

Puntuación del concierto:



Larga vida a las B.V.

P.D: La foto es de un medio guiri buenorro que nos hemos echado de amigo: Carlos Van Gestel. Podéis ver más fotos suyas del concierto en nuestro Facebook.

2 comentarios:

  1. ¡Muy fan de este blog! ¡Gracias por la crónica, chicas! Vuestro punto de vista obsceno es muy necesario en todo concierto que se precie. ¡Que vuelen las bragas!

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  2. Yo estuve y he de decir que vuestra crónica se ajusta muucho a la realidad, incluso a todo lo que se me pasó por la cabeza. Y yo pensando que era un enfermo..., ahora lo se seguro!

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